Buscando pretextos

Escribo para que la muerte no tenga la última palabra.

Debería estar estudiando.
Creo que éste es el peor momento previo al examen.

Cuando falta una semana... pues falta una semana y me puedo relajar.
Cuando el examen es mañana... pues es mañana y aunque no quiera debo estudiar.
Pero cuando aún faltan tres o dos días, en mi mente rondan las dos ideas como peces persiguiéndose el uno al otro en el agua formando un circulo:
"Ya tienes que estudiar" "Aún tienes tiempo" "Ya tienes que estudiar" "Aún tienes tiempo".
(Suspiro)
Entonces, aquí estoy, perdiendo el tiempo chateando con la gente y escribiendo esta entrada, sabiendo (por un lado) que tendré todo el día de mañana para estudiar, y a la vez, con el pleno conocimiento de que mañana en la tarde estaré fuera de casa, por lo que no podré estudiar, y es eso lo que me tortura.

¿Saben? Cuando sean lo suficientemente mayores y quieran formar una familia, procuren manejar el asunto de forma que sus hijos no nazcan a la mitad de un periodo de examenes semestrales.