Sin inicio ni fin

A veces quisiera (extender las alas y) volar lejos de aqui.

UNO MISMO

Existe alguien perdido en sus pensamientos, con la mirada hacia el frente, clavada en la nada. De repente se prenden sus ojos con una luz extraña, de repente se apagan. Suspira y las ideas vuelan sobre su cabeza hasta un lugar que sólo ella conoce, que a lo mejor no existe.
Le gusta sonreír esporádicamente, y los demás sólo pueden hacer conjeturas acerca de la razón.
Porque aún no encuentra a alguien con quien pueda ser la persona llamada "yo".
Es un día nublado con viento, de esos que me ponen melancólica y no me dejan terminar de inspirarme.
Me miro al espejo y converso con él, lloró, le cuento mis problemas y dichas. Le resulta difícil contestarme, me conoce, pero no lo quiere decir porque sabe que no lo aceptaré. No tolero pensar que mi reflejo me conoce mejor de lo que yo a él.
Mientras, aquel alguien camina de forma solitaria por el campo, con sus pesares en cada hombro y en cada mano.
Quisiera que se encontrara conmigo, así podré conocerme como ella lo hace, y ella será comprendida como siempre deseó; que pudiéramos fundirnos en uno solo para al final conformar una figura sin inicio ni fin, para ser un cuadro abstracto que nadie pueda entender.
Pero si ocurriera eso, ¿cuál habría sido la razón por la que escribí tanta tontería? Tal vez sólo para entenderme yo y hacérselo saber a ustedes.
Ojala que no me odien por eso, ojala que puedan comprender.
Porque hoy en día ¿qué mejor amigo se puede tener más que uno mismo?

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